En Facebook tengo la suerte de conseguir mucha información interesante gracias a mis amigos y fans. En este caso me he sentido totalmente identificada con la situación de esta mujer obesa. Está claro que en mi caso me siento identificada porque yo también tengo sobrepeso y porque lo veo todo los días ante el espejo y tampoco me gusta.
En algunos casos mi estado físico ha condicionado mi trabajo, por ejemplo si te toca trabajar con una empresa que defiende el deporte y no lo haces, ahí tienes un problema claro está. En otros, mi estado físico me pasa factura puesto que no puedo responder con la misma agilidad física. Pero jamás ha afectado mi capacidad intelectual o de comunicación que es realmente en lo que se centra mi trabajo como periodista, docente y asesora en Comunicación Digital. Las palabras de esta colega se centran finalmente en el «acoso» y aunque en el vídeo la traducción habla de matón, ella define a quien la criticó como «acosador».
En este sentido he tenido la suerte de no sentir esta situación y de ser respetada por lo que soy y no por lo que ven, a pesar de que para mí, la obesidad tampoco es agradable de sentir y que cuando controle evidentemente la ansiedad estos 30 kilos de más también los podré controlar.
Eso sí, cuando a mí me de la gana.
Deja una respuesta